No matarás

No matarás

Desafortunadamente, en el corazón puro e inocente de todos los hombres, es posible que el mal llegue a habitar en ellos. La violencia, el odio, asesinatos y todo lo que va en contra del a ley y los principios de Dios, son presenciados a diario.

Nos consume nuestra mente y energía, si bien no todos somos partícipes de estos actos, el verlos o vivirlos, consumen y apagan nuestro corazón y alma. El quinto mandamiento de la ley de Dios dicta: “No matarás”.

¿Por qué debemos respetar la vida humana?

La vida humana es sagrada, y es obra de Dios. Nadie tiene derecho a tomar decisión sobre nuestra vida, pues esta le pertenece únicamente a Dios, y el quitarle la vida a otra persona, es una ofensa directa al Todopoderoso.

Aunque Jesús nos enseña que no sólo significa no matar físicamente a una persona, existen diferentes formas de muerte:

  • Primero está la más conocida, asesinar: Ya sea a sangre fría, por defensa, aborto, eutanasia e incluso mediante el suicidio. Todo representa un pecado y ofensa a nuestro Dios pues nos desvían del plan que tiene para nosotros.
  • Matar a otras personas inacción: Esto quiere decir, cuando no prestamos ayuda a quienes nos necesitan, existiendo la posibilidad de salvarlos nosotros mismos.
  • Matar emocional y psicológicamente: Mediante burlas y ofensas que lastiman al prójimo y a nuestros hermanos.

Contrario a esto, Dios nos invita a glorificar la vida, pues al no matar, Dios pretende que todos sus hijos compartan y se den vida mutuamente.

¿Cómo glorificar la vida?

Cuando respetamos la dignidad de nuestros hermanos, glorificamos la vida que Dios les ha otorgado, valorándolos en cuerpo y alma, y protegiéndolos ante todo mal, propio o ajeno.